Aceite de hígado de bacalao El aceite de hígado de bacalao es una grasa líquida que se obtiene del hígado fresco del bacalao del Atlántico o de otros pescados pertenecientes a la familia del bacalao. El aceite de pescado en su composición contiene ácidos grasos insaturados esenciales (AGE) del grupo omega-3, es decir, ácido eicosapentaenoico (EPA) y ácido docosahexaenoico (DHA), y también es una buena fuente de vitamina A y vitamina D. El aceite de hígado de bacalao tiene un efecto positivo sobre la inmunidad, apoya el funcionamiento del sistema inmunológico y apoya su trabajo, en particular se recomienda en otoño e invierno. La vitamina A contenida en el aceite de hígado de bacalao afecta al mantenimiento del buen estado de la piel y las membranas mucosas, apoya el sistema inmunológico, protegiendo al cuerpo contra enfermedades invasivas e infecciosas. Los datos de la literatura indican que los ácidos grasos omega-3 son un elemento esencial en el curso adecuado de los procesos metabólicos. Se ha demostrado que los ácidos EPA y DHA inhiben los procesos de reacciones inflamatorias, así como las reacciones alérgicas.
Omega-3 Los ácidos grasos que contiene el aceite de hígado de bacalao contribuyen a un mejor funcionamiento del cerebro. Las publicaciones científicas destacan el importante papel de los ácidos grasos omega 3 en el proceso de prevención de la demencia. Se ha demostrado que en pacientes con demencia, el contenido de ácidos DHA en el plasma y el cerebro es menor, mientras que se ha descubierto que el aumento del contenido de ácidos DHA en la dieta contribuye a la mejora de la memoria y los procesos de aprendizaje. Cabe destacar que el ácido docosahexaenoico también contribuye al mantenimiento de la visión normal. Este ácido es un elemento de construcción de las membranas celulares de los conos y bastones en la retina del ojo. Aceite de hígado de bacalao Gracias a la presencia de ácidos grasos omega-3, contribuye a mejorar el funcionamiento del sistema cardiovascular. Los ácidos grasos omega-3 reducen el nivel de triglicéridos en la sangre, mejoran el funcionamiento del endotelio vascular y también reducen la presión arterial. Numerosos estudios confirman que los ácidos grasos omega-3 (DHA y EPA) reducen la concentración de triglicéridos en el plasma sanguíneo al inhibir la resíntesis de triglicéridos en la pared intestinal y en el hígado, así como al aumentar la descomposición de estos compuestos. Vitamina A Contenido en el aceite de hígado de bacalao contribuye a: Mantener sano el epitelio corneal, estimular el crecimiento y la diferenciación celular, la estructura ósea adecuada, el buen funcionamiento del sistema inmunológico. Vitamina D El aceite de hígado de bacalao contiene vitamina D que contribuye al correcto funcionamiento del metabolismo del calcio y del fosfato y participa en el proceso de calcificación de los huesos. La deficiencia de vitamina D en la dieta puede provocar numerosos efectos no deseados en el organismo. En las mujeres posmenopáusicas, el enriquecimiento de la dieta con aceite de hígado de bacalao tuvo un efecto beneficioso sobre determinados factores de riesgo de enfermedad coronaria y, más concretamente, redujo la concentración de triglicéridos en la sangre.
Uso sugerido: Consumir una cápsula blanda de 1 a 3 veces al día, preferiblemente antes de la comida.